Ideales para la gente que no coma mucha verdura, porque es una manera de que la coman sin casi darse cuenta.
INGREDIENTES:
Cebolla
Pimiento verde
Ajo
Zanahoria
(también podéis añadirle calabacín, puerro....las verduras que más os gusten)
Leche
Harina
Aceite de Oliva.
Huevo y pan rallado .
PREPARACIÓN:
Picamos las verduras muy bien picadas, yo con la picadora, así salen trocitos muiy pequeños.
Las pochamos en una sartén o cazuela con un poco de aceite de oliva.
Cuando ya tienen color tostadito, añadimos harina y removemos para que se cocine y no deje sabor.
Despues vamos añadiendo la leche muy fria y removemos bien sin parar hasta que vaya cojiendo consistencia.
Es bueno hacer la pasta bien espesa, porque las verduras pueden soltar agua y echar al traste la pasta.
Podéis añadir un poquito de nuez moscada, les dará un sabor muy especial.
Vertemos la pasta, despues de cocinarla unos minutos y que haya cojido la espesura ideal, en una fuente plana y extendemos bien.
Dejamos enfriar.
Damos forma, pasamos por pan rallado-huevo batido y pan rallado y freímos hasta que se doren.
Servimos calientes o frias, porque están ricas de todas maneras.
Buen Provecho!!!
