Os lo muestro.
400 gr de fresas congeladas
400 gr de nata para montar . Muy fria.
100 gr de azúcar glas.
1 cucharada de azúcar invertido o miel de sabor suave.
PREPARACIÓN:
En una picadora vamos poniendo las fresas ( sin la parte verde por supuesto) junto con el azúcar glas y trituramos. Si nos caben todas de una vez iremos haciéndolo de poco en poco repartiendo el azúcar.
Después añadimos la nata (sin montar) y la miel y batimos con la batidora todo junto hasta tener una mezcla homogénea.
Vertemos el helado en un recipiente que tenga tapa y quede bien cerrado.
Lo introducimos en el congelador. Pasados unos 3/4 de hora sacamos el helado y lo volvemos a batir o simplemente remover con una cuchara.
Lo volvemos a meter el congelador hasta que obtengamos la textura deseada.
En mi caso pudimos saborearlo a la hora y media de hacerlo.
* No queda muy dulce, así que podéis añadir más azúcar, aunque yo le pongo esa medida porque nos gusta el sabor ácido de las fresas.
** Conseguir la textura puede llevar más tiempo, dependiendo de la tª del congelador, asi que viene bien vigilarlo a menudo . No hay problema al sacarlo del frio tantas veces como necesitemos.
*** Las fresas necesariamente tienen que ser congeladas.