Hoy he dado un pasito hacia delante y he probado a hacer el pan de molde con un toque dulce : Pan de leche.
Bueno, no tengo palabras para describir lo bueno que ha salido. Es super tierno, con miga esponjosa y con un toque dulce pero sin pasarse. Ideal para tostadas, sandwiches o comerlo sólo.
No me enrollo más y paso a contaros la receta...
INGREDIENTES: (para un pan mediano, suficiente para unos dias)
375 gr de harina de fuerza
225 gr de leche
40 gr de mantequilla
1/2 pastilla de levadura fresca (13 gr +/-)
1 cucharadita de sal
60 gr de azúcar
PREPARACIÓN:
Mezclamos en un bol los ingredientes por este orden; harina,leche tibia,mantequilla en dados (temperatura ambiente), levadura desmenuzada, sal( procurando no echarla encima de la levadura) y el azúcar.
Amasamos bien durante unos 10/15 minutos hasta hacer una masa elástica y que la manetquilla se funda.
colocamos la masa en un bol enharinado y la cubrimos con un film transparente.
La masa es muy pegajosa, no echeis más harina.
Para facilitar el amasado podéis untaros las manos con aceite o con harina cuando lo necesitéis.
Dejamos en un lugar cálido que leve hasta alcanzar más o menos el doble de su tamaño.
Preparamos un molde , de los de plum cake (alargado) , con papel de hornear , de manera que sobresalga por los laterales.
Pasado el tiempo y cuando la masa haya levado, la ponemos en la mesa enharinada y amasamos para desgasificar. Unos 5 minutos.
Dividimos la masa en cuatro partes iguales y les damos foma de bollo.
Ahora iremos colocando los bollos en el molde , apretándolos bien y cubriendo todo el molde.
Dejamos levar de nuevo hasta que doblen su volumen más o menos.
Una vez levado pintamos con yema de huevo batida con leche.
Si quereis que no coja tanto color como el mio, podeis añadir más leche a la yema o usar el huevo entero batido.
Metemos el pan en el horno precalentado a 200º y horneamos durante una media hora. El tiempo ya sabeis que depende del horno y de la calidad de los ingredientes. Yo en 20 minutos lo tenía listo.
sacamos del horno, desmoldamos y enfriamos sobre una rejilla. La mejor manera de hacerlo es poniendo el pan tumbado sobre un lateral, para que no se baje el centro.
Una vez frio podeis conservarlo en una bolsa de plástico para que dure más. Puede durar una semana sin problemas.
Así es como hay que colocarlo en el molde para su cocción.
